viernes, 6 de marzo de 2009

Mientras hay vida musical hay esperanza

¡Parece que hay buenas noticias!

Kasquereteros y amantes de la buena música, no os deshidratéis por el llanto por la muerte de Juanita. Gracias a nuestro querido maestro la he llevado al hospital Virgen de Rubenca, en el que, tal vez, la puedan reanimar y si sucede un milagro, devolverla a la vida musical, aunque no me han dado muchas esperanzas. Soy algo pesimista pero de momento, Juanita lucha y sigue aferrándose a las cuerdas. Si queréis ir al hospital a visitarla, se encuentra en el taller número 1, cuarto estante a la derecha. En la unidad de recuperación de clavijeros. Yo voy a visitarla todos los días, aunque no me dejan tocarla. Los arregladoresdeguitarras me dicen que va mejorando. También que cuando salga de arreglos intensivos podré tocar algún arpegio suelto, pero nada de quintas por ahora. Aún es pronto para saber si podré volver a tocar canciones de Héroes con ella.

Mientras tanto, otro Kasquetero generoso, me deja su querida guitarra. Cada vez que la toco, me doy cuenta que no es mi Juanita. Me recuerda algo a ella, porque tiene una gran cicatriz en el clavijero. La misma que imagino que le quedará a Juanita después de las múltiples operaciones a la que la someten. Desde aquí, gracias Miguel por dejarme llenar el silencio que ha dejado Juanita. A la reina de Saba, por ofrecerme su electric guitar (sin ampli) y a los demás Kasqueteros (+ maestro) por su apoyo y sus cálidos mails.

Que distinta suena la nueva y cuanto echo de menos a Juanita!!!!!

Pobre Juanita!!!

Kasqueteros, snif, snif, Juanita… ha muerto, snif, snif.

Sufrió un accidente fatal. Ya lo dice todo el mundo, las motos, son muy peligrosas. La tragedia se produjo en el último tramo del garaje, oí un golpe, supuse que se había dado Juanita con algún respiradero y llevaría un golpe, aunque también me temía lo peor. Abrí la funda y vi horrorizado como a la pobre Juanita, decapitada, le colgaba el clavijero. Era una escena de muerte musical y desolación. Había astillas por todas partes. Allí yacía, sin su porte esbelto, con las cuerdas destensadas.


Esta vez, la funda, si hizo de ataúd. Mi querida Juanita…, la de cosas que habíamos pasado juntos. Ahora siempre estaba afinada… Recuerdo cuando era un bebé y había que afinarla cada vez que la tocabas. Recordé su corta, pero intensa vida, incluso algunos momentos un tanto turbios, cuando fue obligada a ‘dormir’ con Virgini y otro Kasquetero. No quiero ni pensar las cosas horribles que vio e hizo. Desde entonces ya nunca fue la misma.


Aquí tenéis una foto de ella. Espero que todos la recordemos como esa alegre guitarra española que tantas notas nos ha dado y tanto me ha hecho aprender (bueno, no tanto). He hablado con nuestro querido maestro y me ha recomendado un hospital en el que, tal vez, la puedan reanimar y si sucede un milagro, devolverla a la vida musical, aunque no me ha dado muchas esperanzas. Me temo, que esta vez, ni siquiera la sabiduría del maestro, podrá devolverla a la música.

Ayer fue un día triste.

jueves, 5 de marzo de 2009

Nuevos tiempos para casquete

Señores y Señoras, Casquete está imparable.

Pueden usurparnos el aula (es que han puesto una película en el salón de actos y ...)
Pueden quitarnos minutos de clase
Pueden hacernos la anchoa con el local de ensayo
Pueden llevarnos lejos del maestro
Pueden decapitar a nuestras amadas guitarras
Pueden desafinarnos las cuerdas
pero nunca lograrán quitarnos...

... un La ! (Maj7 a ser posible, que siempre da mucho color)